El camino

Ayer domingo le quité el chicle de la suela a las zapatillas y aproveché para limpiarlas. Hay toda una cultura alrededor del cuidado y limpieza de las zapatillas. Las redes sociales están repletas de tutoriales. Yo fui muy aficionado a la cultura de las zapatillas, en inglés, sneakerhead.

David Vidal, “peregrinodelavida33” en Instagram, no usa zapatillas; camina con unas sandalias de una marca que intuyo que lo patrocina, Hommo Sandals. La gente le ofrece regalarle calzado, pero él siempre rehúsa los ofrecimientos. Sí facilita su número de teléfono para todo aquel que le quiera regalar dinero. Sé de él desde hace tan solo unos días. Creo que todo comenzó con el Camino de Santiago, allí fundó “La casa de los dioses”, de la que se puede encontrar información en Internet, una comunidad que recibe a los peregrinos con comida y alojamiento sin pedir nada a cambio, excepto la voluntad. Vidal tiene facilidad de palabra e infulas de gurú. 

Agradece a la vida y camina. 

Según él mismo narra en muchos de sus videos, siempre ha trabajado mucho, hasta que la empresa que fundó sufrió una quiebra por valor de algo más del millón de euros y entonces emprendió “el camino”. 

Ahora mismo está en Italia y ha pasado por Francia. El GR-7 es un punto de partida para recorrer Europa andando. Se baña en ríos o duchas improvisadas y duerme al raso, en casa de alguna amistad que le coga al paso o en ermitas o edificaciones abandonadas. Pasa por las ciudades e interactúa con la población local, siempre con amabilidad y una sonrisa; de este modo consigue que lo inviten a comer o a tomar un café. Recoge basura de las playas y los caminos y lo muestra orgulloso en sus vídeos diarios. 

Durante la tarde pude leer hasta cumplir el objetivo marcado, incluso un poco más allá. 

Por la noche puse la televisión; jugaba la selección española. Ganó. Era un partido clasificatorio.

Los partidos siempre suenan de fondo, pero soy incapaz de prestarles atención, excepto cuando marcan un gol, que veo la repetición; mientras tanto, leo o miro el móvil. 

Después estuve viendo un documental sobre Aaron Hernández, el que fuera jugador de la NFL. En su día me llamó mucho la atención su caso: una joven estrella del deporte, en el mejor equipo de la liga, que fue condenado a cadena perpetua por asesinato y terminó suicidándose en su celda.

Jesús de la Palma