Daimon

Imagina que entras a un museo habiendo estudiado historia del arte: conocerás las circunstancias que dieron pie a la realización de cada obra, descubrirás los matices más sutiles, diferenciarás estilos y escuelas, conocerás el mensaje que subyace tras cada imagen; digamos que es lo más parecido a abrir un libro en el propio idioma. De lo contrario, entrar en un museo sin haber estudiado la historia del arte, o, al menos, no teniendo unas nociones básicas, es lo más parecido a abrir un libro en idioma extranjero. Ahora piensa en la vida misma: quien ha estudiado filosofía se asoma a ella como el historiador del arte al museo; quien no, tiene ante sí un libro en idioma extranjero, y debe contentarse con una traducción falaz e interesada.

Jesús de la Palma 

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