Intimidades

En alusión a su estreñimiento, Ionesco se manifiesta en su diario en los siguientes términos: «Estas angustias del cuerpo me impiden pensar, impiden mi libertad». Se queja de que, después de meterse un supositorio en el ano y esperar hasta las diez y media, cuando los demás de la casa han terminado de evacuar, en la espera no puede concentrarse en la lectura de las “Confesiones” de san Agustín. Me pregunto si al escribir estas líneas pensaba que terminarían siendo publicadas y traducidas a varios idiomas.Tengo dos ediciones de sus “Diarios”, la de Gedisa, con una pésima traducción, y que no recomiendo, y otra de Páginas de espuma, no solo de más calidad en cuanto a la traducción, sino en la edición completa; aun así, se echa de menos en ambas un estudio introductorio.

Jesús de la Palma 

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