¿Hablar? Mejor de lo que se conoce

Leo en su libro de entrevistas que Michael Haneke recomienda a sus alumnos no embarcarse en sus primeros proyectos en guiones demasiado ambiciosos, ya que carecen de madurez para dar con la fórmula adecuada. Les recomienda, por lo tanto, que "rueden algo sobre su abuela". Finalmente esto no es más que la fórmula magistral por todos consabida: "Habla de lo que sepas, de lo que no, mejor guarda silencio". Esto mismo ya lo ilustra  Descartes en sus "Meditaciones metafísicas", a saber: «Si me abstengo de dar mi juicio acerca de una cosa, cuando no la concibo con bastante claridad y distinción, es evidente que hago muy bien». Esto, no obstante, se aprende con los años y a fuerza de errores. Yo mismo me he convertido con el paso del tiempo en diarista, contentándome con narrar mi universo particular, que es el que entiendo y donde si doy un traspiés, a nadie engaño ni perjudico. Se puede armar perfectamente una obra literaria hablando de 'la abuela"; de lo que a uno le acontece en el día a día; de las vivencias e impresiones particulares; todo depende de las aspiraciones y la honestidad, y la capacidad, por supuesto, de cada uno; pero como lema, eso sí, el de Descartes; de este modo, si uno sabe de mecánica cuántica y su vida se desarrolla en clases y auditorios, pues que adopte su fórmula; como si es cineasta, como Haneke, y se dedica a escribir guiones; la cuestión está en no abarcar más de lo que se puede coger; algo que en principio parece muy sencillo, aunque no lo es en absoluto.

Jesús de la Palma 

Comentarios

Entradas populares de este blog

Yo no soy malo (ficción narrativa)

“Fresas salvajes”, “Olive Kitteridge” y “Panza de burro”

Cuajo