Un hombre del siglo XXI

Javier es un hombre del siglo XXI. Es médico, bombero, policía, juez, abogado, matemático, escritor, editor, yutuber e instagramer. Vive solo, es totalmente independiente, y su círculo más íntimo lo conforman unas quinientas personas, entre familiares y amigos. En Redes Sociales tiene al menos dos millones de seguidores. Javier vive solo, no tiene hijos porque aún es joven y siempre será joven; tiene éxito con las mujeres, siempre sabe lo que quieren; les hace el amor en silencio y con decisión y nunca las llama al día siguiente, deja que ellas se acerquen a él. A sus padres les compró un chalé en Menorca y a cada una de sus amantes le busca un puesto fijo en un Ayuntamiento y les compra un piso en la calle de atrás. Javier es un hombre del siglo XXI, hecho a sí mismo, tanto es así, que nació solo, mientras su madre estaba de vacaciones en Benidorm. La llamó por teléfono después de la siesta y le dijo que estuviera tranquila, que descansara, que el ya se las arreglaba para nacer. Mientras fue bebé, por las noches se iba al cuarto de baño y cerraba la puerta para llorar en silencio y no despertar a sus padres, y a los cinco años se independizó. Javier trabaja veinticinco horas al día y a veces, sobre todo los fines de semana, hace horas extras. Está comprometido con el medioambiente y solo bebe agua del grifo. Nunca se equivoca y, como tiene una memoria privilegiada, todo lo que dice lo apunta al llegar a su casa en un cuaderno Moleskine de color negro, porque todo lo que dice tiene un sentido trascendental. Javier es un hombre del siglo XXI por esto y muchas cosas más, tantas, que darían para estar toda una vida leyendo acerca de sus virtudes; toda una vida, ojo, sin dormir, porque dedicando las noches al descanso, la lectura daría, sin duda, para dos vidas.

Jesús de la Palma

Comentarios

Entradas populares de este blog

Yo no soy malo (ficción narrativa)

“Fresas salvajes”, “Olive Kitteridge” y “Panza de burro”

Cuajo