Sensacionalismo orweliano
El circo televisivo montado en torno a la pandemia a lo largo de todo este tiempo ha sido un espectáculo dantesco, horas y horas y de contenido vacio, haciendo malabares con las cifras y apelando al sensacionalismo más exacerbado; mientras tanto, la realidad del ciudadano se solapa: según la OMS, en 2019 se suicidó una persona cada cuarenta segundos en el mundo, ococientas mil al año, cifra que, es de suponer, habrá crecido exponencialmente en los años 20/21; la riqueza se concentra cada vez en menos manos, con la consecuente agudización de la brecha entre clases; vivimos en una realidad distópica donde, tanto en informativos televisivos como en tertulias, parecen repetir hasta el hartazgo aquel leitmotiv orwelliano de "la guerra es paz, la libertad es esclavitud, la ignorancia es la fuerza". En palabras del mismo G. Orwell: "Lo importante no es manterse vivo, sino mantenerse humano".
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